En las etapas tempranas del desarrollo infantil, la capacidad de asimilar e integrar nuevas experiencias en respuesta a ambientes enriquecidos con estímulos debidamente programados es mayor gracias a la posibilidad de aumentar las interconexiones neuronales.

Por tanto, la eficacia de los tratamientos se basa en la precocidad de la intervención, ya que el cerebro se va construyendo en el tiempo, acomodándose a las diferentes etapas del desarrollo, permitiendo el aprendizaje y la posible recuperación funcional.

En el Libro blanco de la Atención Temprana, editado en 2011 por el Real Patronato sobre Discapacidad, se define esta como el conjunto de intervenciones dirigidas a la población infantil de 0 a 6 años, a la familia y al entorno, que tienen por objetivo dar respuesta lo antes posible a las necesidades transitorias o permanentes que presentan los niños y las niñas con trastornos en su desarrollo o que tienen riesgo de padecerlos.

Expresado de otra manera, la atención temprana trabaja en la prevención, diagnóstico e intervención para potenciar las capacidades del menor, apoyar a las familias y facilitar su integración social. Para todo esto se intenta considerar la globalidad del menor y siempre se debe contar con un equipo multidisciplinar. Esto implica en muchas ocasiones contar con la coordinación de las consejerías responsables en materia de educación, servicios sociales y sanidad, dado que los trastornos del desarrollo son un problema de salud que también deben ser abordados desde los ámbitos sociales y educativos.

La atención temprana en Canarias se regula por la Ley 12/2019, de 25 de abril. En ella se reconocen las dificultades de la atención temprana en Canarias y la necesidad de solucionarlas. Partiendo del hecho de que la necesidad de atención temprana afecta a miles de menores en Canarias, constituye un instrumento imprescindible para lograr su máxima autonomía futura y la superación de las desigualdades.

En 2020 se pusieron en marcha las dos primeras unidades contempladas en el Plan de Atención Temprana de Gran Canaria y Tenerife. En 2021 comenzó a funcionar la UAT (Unidad de Atención Temprana) de Fuerteventura. El Gobierno de Canarias ha anunciado la puesta en marcha de otras seis nuevas unidades de Atención Temprana en el Archipiélago: La Palma, Lanzarote, La Gomera, El Hierro y una segunda unidad en cada una de las islas capitalinas.

Además, existe un borrador de Estrategia Canaria sobre Atención Temprana, elaborado conjuntamente por las Consejerías de Empleo, Políticas Sociales y Vivienda, de Sanidad y de Educación y Universidades, en el que ha participado la Dirección General de Protección a la Infancia y la Familia. El Consejo Económico y Social, en su Dictamen 1/2021 recomienda que ese documento sea sometido a una profunda revisión.

Por otro lado, el Parlamento de Canarias publicó el 11 de mayo de 2021 una proposición no de ley sobre impulso al cumplimiento de la Ley 12/2019, de 25 de abril, por la que se regula la atención temprana en Canarias.

Pese a las dificultades en el desarrollo de una estrategia autonómica, existen diferentes asociaciones en Canarias que han ofrecido durante los últimos años servicios relacionados con la atención temprana.

Consideraciones
Además de numerosos estudios e informes, tanto la Ley 6/2014, de 25 de julio, Canaria de Educación no Universitaria, como la Ley 12/2019, de 25 de abril, por la que se regula la atención temprana en Canarias, inciden en la importancia de la detección y atención de posibles trastornos y dificultades de aprendizaje en los primeros años de la infancia, por lo que es imprescindible que se utilicen los recursos tantos profesionales como instrumentales para su diagnóstico e intervención. Esta detección y seguimiento debe aplicarse, asimismo, al alumnado que presente características que revelen la futura existencia de altas capacidades.

Propuestas

  • Agilizar la elaboración y aplicación del Plan Integral de Atención Temprana de Canarias y el cumplimiento de la Ley 12/2019, de 25 de abril, por la que se regula la atención temprana en Canarias. Es fundamental aprovechar la ventana terapéutica en los dos  primeros años de vida del menor o la menor para la detección de dificultades y determinar si son promovidas por el entorno o son parte de algún trastorno del desarrollo, lo que, a su vez, permitiría comenzar lo antes posible con la intervención y estimulación global del menor o la menor.
  • Actuar de forma urgente en la creación de nuevas Unidades de Atención Temprana.

Esta entrada es un extracto de las páginas 53 a 55 del Informe sobre la realidad educativa de Canarias: Políticas para la igualdad de oportunidades y la equidad educativa, donde se aborda esta situación.

En el siguiente enlace puede encontrar otras Píldoras del Informe sobre la realidad educativa de Canarias: Políticas para la igualdad de oportunidades y la equidad educativa – Consejo Escolar de Canarias.

En este enlace puede encontrar datos publicados en julio de 2022 por el Servicio Canario de Salud sobre Atención Temprana en Canarias AT_Red_Recursos.pdf (gobiernodecanarias.org).